De acuerdo con los resultados de diversos estudios a nivel internacional, el tabaquismo aumenta la incidencia, la prevalencia, la gravedad y la mortalidad por Covid-19. “De hecho hay tres últimos metaanálisis, es decir un conjunto de trabajos de investigación, que demuestran que el riesgo de enfermarse o de tener mayor gravedad o morir es entre 1.9 y 2,4 veces. dos a 14 veces más en las personas que son fumadoras”, afirmó Lidia Amarales, coordinadora de Salud Pública de la Escuela de Medicina de la Universidad de Magallanes (UMAG).
Más aún, agregó, “un trabajo de investigación realizado en China demostró que el tabaquismo es un factor de riesgo de progresión de la enfermedad, 14 veces mayor”.
La ex subsecretaria de Salud Pública explicó que también se ha demostrado que los fumadores representan un factor de contagio mayor que el resto de la población: “Por un lado, se sacan la mascarilla para fumar. Segundo, el humo del tabaco pone en suspensión los virus por lo tanto genera que puedan llegar más lejos, hasta dos metros, solo por el hecho del humo emitido por una persona fumadora”.
Amarales agregó que “el fumador claramente tiene mayor posibilidad de contaminarse no solo por la disminución de la inmunidad que tiene en la vía aérea, sino que el virus se transmite a través de las manos y una persona que hace el movimiento mano boca, 200 veces al día por fumar, tiene otro factor de contagio”.
La médica broncopulmonar infantil enfatizó que una persona fumadora no solo es más contagiante y a la vez tiene más riesgo de contagiarse del virus circulante solo por el hecho de ser fumadores. Además, representa un riesgo para los fumadores pasivos, especialmente los adultos mayores y los niños.
“Los más pequeños son fumadores pasivos de segunda mano, que significa que reciben el humo del tabaco directamente de una persona fumadora; y de tercera mano, es decir que reciben los más de seis mil componentes que el tabaco tiene y que son dañinos para la salud, a través de la impregnación que los adultos tienen de estos elementos en el pelo, la ropa, las manos o en la misma casa cuando los padres fuman en el hogar cuando los niños no están presentes”, acotó la experta en Salud Pública.
Amarales subrayó que “si vemos que el tabaquismo aumenta la gravedad del Covid en adultos, por supuesto que afecta en la incidencia, en la prevalencia y en la gravedad de esta enfermedad en los niños. Así como lo hizo la Organización Mundial de la Salud (OMS) este año, el llamado es a comprender que es el momento de dejar de fumar y que los adultos fumadores entiendan que deben hacerlo por su salud personal y también para proteger a sus hijos o sus nietos que están recibiendo directa o indirectamente el humo del tabaco y les están produciendo mayor posibilidad de incidencia, prevalencia y gravedad por Covid”.