El médico neurólogo asumió el importante desafío de ser candidato a Constituyente para defender y representar las necesidades del Maule Norte.
Nació en el Hospital de Talca, tiene 62 años y una trayectoria de 40 años que lo antecede. El Dr. Francisco Claver ha vivido toda su vida en el Maule, es casado hace 37 años, tiene 4 hijos y 8 nietos. Su apego al Maule es tan grande que decidió ser candidato a Constituyente porque “quiero la mejor Constitución para mi país, ya que será la carta de navegación por los próximos 50 años”, menciona.
“Estudié hasta 4to básico en Las Concentradas de Talca y después hasta 4to medio en el Liceo Integrado San Pío X. Estudié Medicina en Concepción y en el año 85 ya como médico general en Talca me gané una beca en la Universidad de Chile donde me titulé de médico neurólogo. A través de todos estos años he aprendido a conocer muy bien la realidad, carencias, situaciones y necesidades que tienen los maulinos, por lo mismo, durante estas 4 décadas, siempre he atendido por Fonasa debido a que el costo de la salud sigue siendo elevada”, dice el candidato respecto a su vida y experiencia en la región.
EJES
El doctor Claver, menciona que tiene tres ejes principales que quiere defender en la nueva Constitución: Una salud mental digna, que haya más seguridad para los chilenos y que la migración sea responsable y regulada.
Respecto a la salud mental, Claver indica que “es fundamental. En Chile no hay nada concreto en términos de acompañamiento, programas, infraestructura, etc. dedicada a la salud psíquica de las personas. Es un derecho que está en nuestra actual carta magna y aún así no está garantizado”.
“Las penas en Chile son muy bajas, tienen que ser proporcionales al delito y es algo que yo defenderé incansablemente, además de que se impulse con acciones concretas la reinserción y rehabilitación en la unidades penitenciarias”, dice el candidato en lo relacionado a la seguridad.
Finalmente, la migración es un tema preocupante para Claver, el que defenderá con convicción en la Constitución: “en nuestro país, la migración debe ser justa y responsable tanto para los migrantes como para quienes vivimos acá. Debe ser regulada para que se asegure salud, educación, hogar y empleo de calidad, para cada una de las personas que vivimos en este territorio” concluye.
