El ministro de Salud fue consultado por un eventual conflicto de interés al asumir en dicha cartera tras haber sido gerente general de la Clínica Las Condes. “Nadie está exento de conflictos de interés”, afirmó también el secretario de Estado.
En los últimos días han ocurrido un par de hechos que han tenido a la salud en el foco de atención: hace cuatro días cambiaron al ministro de Salud, Emilio Santelices, por Jaime Mañalich, y se han registrado incidentes a modo de protesta al interior del Compin por la dificultad de los trámites.
El nuevo jefe de la cartera se refirió a estos temas en entrevista con Chilevisión. Consultado sobre el momento que está viviendo el Compin, debido a las graves dificultades que han denunciado usuarios en el pago de licencias, Mañalich sostuvo que “la situación es peor, porque el volumen de licencias médicas que están manejando los compines es cada vez mayor. Crece a razón de más de 10% por año, con una forma de trabajo que estructuralmente está obsoleta. Y en ese contexto quiero recordar que ha enviado el Presidente un proyecto que, al reformar el sistema de salud en Chile, crea una institución diferente a estos compines que dependen de la Subsecretaría de Salud Pública, para hacerse cargo de todo el sistema”.
Nosotros podemos estar reportando todos los días de una situación como la que ustedes describen, pero la solución viene por un cambio estructural del sistema de gestión y asistencia de licencias médicas”, continuó el ministro.
Consultado sobre la posibilidad de realizar mejoras inmediatas, más allá del proyecto de ley, el secretario de Estado afirmó que “es posible y la subsecretaria Daza ha anunciado este plan de contingencia, que pasa, por llamarlo de alguna palabra, por una revolución digital del manejo de los Compines. Y eso lo podemos hacer ahora y efectivamente, como ya lo hizo ver la Seremi de Salud en la Región Metropolitana,tenemos que mejorar los protocolos de atención”.
“Sin embargo, quiero recordar que estamos hablando de un beneficio pagado por todos los chilenos a través de impuestos generales, y en ese contexto este beneficio tiene que estar justificado por los médicos, por los certificados, porque de lo contrario son cheques en blanco, de los que hay que decirlo también, se abusa en perjuicio de la salud y del financiamiento de atenciones o de licencias médicas de otras personas. Como se dice en Chile: terminan pagando justos por pecadores”, agregó Mañalich.
Conflictos de interés
También se le consultó sobre el eventual conflicto de interés que implicaría el haber pasado de la Clínica Las Condes al Ministerio de Salud. “Creo que esta división que se hace entre el sector público y el sector privado, y que la gente que entra a trabajar en el sector público tiene que mantenerse siempre ahí, o en el sector privado lo mismo, es una falacia. Las personas pasamos de un sector a otro, y me parece eso extraorinariamente sano, y este anatema que se hace me parece inadecuado para el país en general a la hora de convocar talentos. Es una restricción espuria”, sostuvo la autoridad.
“Quiero señalar con toda claridad, nadie está exento de conflictos de interés. Funcionarios del sector público, la influencia que la industria trata de ejercer a través de los parlamentarios, todo eso tiene que estar encima de la mesa, porque conflictos de interés hay en todas partes, no solamente en la conjunción de un sector privado con un sector público en un área determinada. A mí me tocó tramitar, con mucha dificultad, la primera ley de fármacos, la ley de tabacos,la ley de etiquetados de alimentos y los conflictos de interés en todos los sentidos eran para mí completamente evidentes”, afirmó Mañalich.